La mirada de los demás es todo, y los otros no te ven a vos, ven lo que piensan de vos. La mirada de los otros tiene sonido, voces, susurros. No se puede escapar a lo que ven de nosotros. Todo se trata de cómo nos ven y como vemos a los demás. Quedamos atrapados en esa mirada, inmóviles, fijados en lo que creemos que vemos, confiando más en nuestro prejuicio que en nuestros ojos. Dicen que la primera impresión es la que cuenta, pero también que lo esencial es invisible a los ojos. ¿Cuándo me van a sacar esos ojos de encima y van a ver lo que realmente soy?
No hay comentarios:
Publicar un comentario