El miedo a veces es lo que mas lastima, el que nos detiene y no nos deja hacer las cosas como tienen que ser, el que nos deja con las palabras en la punta de la lengua por “miedo” a lo que pueden llegar a decir, a como se tomen eso que dije. El miedo al compromiso, miedo al rechazo, miedo al fracaso, miedo a los cambios, cualquier miedo puede dejarnos llorando por no animarnos a hacer lo que debemos o lo que queremos, y en vez de arriesgarnos y pensar que las cosas pasan porque tiene que pasar decimos, bueno la próxima no voy a tener mas miedo, cuando bien sabemos que eso es mentira, porque siempre que esa próxima vez llega volvemos a tropezar con la misma piedra y volvemos a decir lo mismo, o directamente, nos rendimos. Siempre antes de hacer algo pensamos que va a salir todo mal, entonces por miedo a eso, no lo hacemos. Pero, ¿si sale todo bien y podríamos estar disfrutando de lo que mas deseamos y no lo hacemos por miedo? El miedo ayuda a pensar las cosas dos veces antes de hacerlas, en ese sentido esta bueno, pero que el miedo no impida hacer las cosas que realmente tenemos que hacer.